Carmen Caliente provoca a su amigo de hermanos con pasos seductores antes de que entren en acción. El tiempo transcurrido entre el cierre de las puertas del baño y su reapertura, un parpadeo para el observador casual, es el tiempo que estos dos tienen para sus cuerpos para una exhibición embriagadora de pasión juvenil, una llama encendida, luego explotada en un beso dentro de los confines del baño.